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miércoles, 8 de febrero de 2017

RESIDENT EVIL: CAPÍTULO FINAL. La saga de Resident Evil, sexta parte y última parte... por ahora.


RESIDENT EVIL: CAPÍTULO FINAL
Resident Evil: The Final Chapter, Paul W.S. Anderson, 2016

Todo lo bueno tiene que terminar... y todo lo malo, también; como en este caso. Muchas sagas cinematográficas deciden despedirse con finales espectaculares. Tal es el caso de El Señor de los Anillos (Jackson, 2001-2003) la Trilogía Original de Star Wars (Varios, 1977-1983) o Matrix (Hnos. Wachowski, 1999-2003). Esto suele funcionar para las trilogías, porque cuando la serie supera la tercia de películas, es más difícil darle un buen final. Hay sagas como Halloween, Pesadilla en la calle del Infierno, Saw o El planeta de los simios que en vez de irse con un Grand Finale, van menguando hasta que la última entrada de la franquicia se parece más a un perrito viejo que es más humano poner a dormir para liberarlo de su sufrimiento. Éste es el caso de Resident Evil.


    En esta sexta entrega, y en su tradicional costumbre de echar por la borda las líneas argumentales que se plantearon en las películas anteriores, Albert Wesker (Shawn Roberts) traiciona a los sobrevivientes que había convocado para defender Washington, D.C. Alice (Milla Jovovich) se convierte de nuevo en una paria y es contactada por la Reina Roja (Eva Gabo Jovovich, hija de Jovovich y Anderson) para detener a Wesker y al Dr. Isaacs (regresa Ian Glen porque, alabados los dioses, Anderson se dio cuenta de que para que tu película se pueda ver por lo menos uno de los miembros de tu elenco debe actuar) en el último intento por salvar a la humanidad de la extinción total. Para ello, deberá viajar a las ruinas de Raccoon City, donde encontrará a un grupo de sobrevivientes entre los que se encuentra Claire Redfield (Ali Larter). Alice descubrirá muchos secretos sobre la fundación y los planes de la Corporación Umbrella, y sobre su propio origen. También se enfrentará a un terrible dilema, pues al activar el antivirus que salvará a nuestra especie, todos los organismos infectados con el Virus-T morirán... incluida ella.


    Antes que nada, el texto siguiente está lleno de SPOILERS, advertidos quedan.
    Supongo que algún mérito debe tener una película de la cual no esperaba nada y que, aun así, logró decepcionarme. Por principio de cuentas, diré que el argumento ya ni siquiera es malo; sino ocioso. Básicamente, la premisa de esta saga se agotó en la tercera entrada y, a partir de ahí, se ha tratado de darle vueltas al mismo asunto. Porque además... si la civilización se colapsó en la tercera cinta y los pocos sobrevivientes que quedaban fueron brutalmente masacrados en la quinta ¿Qué más da? ¿Cuál es el punto de todo esto?


    Al menos regresa Ian Glen quien, gracias a la magia de la clonación, no sólo resucita de forma inverosímil; sino que hace dos papeles. Uno de ellos es un fanático religioso que es aún más inverosímil y que rompe con la lógica del personaje.  
    Y hablando de romper la lógica... ¡No manchen! Casi cada revelación que se nos hace sobre el origen de Alice o de Umbrella contradice todas las películas anteriores. Como eso de que la Reina Roja operando bajo algo parecido las Leyes de la Robótica ¡Por favor! Entonces la primera película no hubiera sucedido. Por cierto que uno de los únicos elementos de los videojuegos que aparecen en esta película es el que se desvela como co-fundador de la Corporación Umbrella, el Dr. James Marcus de Resident Evil 0 (Capcom, 2002)… que apenas si entra en la trama de refilón.


    Otro de los personajes de los videojuegos que aparecen en la cinta es el monstruo conocido como Regenerador, de Resident Evil 4 (Capcom, 2005). Contrario a lo que nos tiene acostumbrados la serie, se ve bastante bien. Al menos no se ve una masa CGI toda chafona... quizá porque la escena es muy oscura; pero aun así me agradó. Aparece también el mutante volador conocido como Popokarimu, de Resident Evil 5 (Capcom, 2009), aunque ése no impresiona tanto.
    La cinta es la más oscura de toda la saga. No en cuanto a su tono; sino a su fotografía. Eso, aunado al truco de mover la cámara todo el tiempo para que parezca como que la película tiene mucha acción llevado al punto del absurdo, logra que haya momentos en la película en los que de plano uno no se entera de qué rayos está pasando. Tampoco pude dejar de pensar en todo momento que quizá la fotografía era tan oscura para ocultar el hecho de que tanto Jovovich como Larter ya se ven grandecitas ‒lo cual viene a ser irrelevante, no debieron tratar de ocultarlo‒.


    A lo anterior súmenle la parodia de guión de la peli y las actuaciones de risa loca y ya estuvo. La verdad es que me reí más con películas anteriores de la saga; pero en la escena que sí solté la carcajada fue en esa “seria” discusión entre Alice y Claire en la que deciden lo que van a hacer. Que, por si las actuaciones malas fueran poca cosa, está terriblemente editada. Estoy casi seguro de que originalmente la escena era más larga, pero la cortaron a la mala porque les pareció “aburrida”.
    Toda la peli sufre de una edición burda. Como si creyeran que para darle más acción y emoción necesitaban cortes duros. Al final, todo el montaje es caótico y hace parecer que la película la cortaron a machetazos.


    Ya que mencioné la escena de la discusión en la enfermería entre Alice y Claire… ¿No les parece sospechosamente parecida a esa escena de la enfermería en Alien 3 (Fincher, 1992)? También La escena del ventilador gigante me recuerda a una de Alien 3, y hasta el vestuario de Alice se parece un poquito al de Ripley en aquella cinta... Del mismo modo, eso de que la Reina Roja no puede atacar a un empleado de Umbrella y uno de los fundadores de la Corporación despide a Wessker para que pueda ser eliminado pues amenaza su vida es un fusil descarado del final de RoboCop, el defensor del futuro (Verhoeven 1987). La idea del Dr. Isaacs comandando un ejército de zombies supuestamente domesticados que terminan volviéndose contra él también guarda sorprendentes semejanzas con la trama de los cómics de Aliens: Nightmare Asylum (Dark Horse, 1989-1990). La escena de los sobrevivientes corriendo hacia el cráter de acceso a La Colmena mientras son cazados por los Cerebus ‒que aquí en la película son mutantes grandes y descarnados, a diferencia de los videojuegos en los que usan dicho nombre para referirse a los perros mutantes‒ es muy parecida a la escena de El mundo perdido: Parque Jurásico (Spielberg, 1997) en la que los personajes corren a través de un pastizal asediados por velociraptors. También la escena en la que Isaacs revive por medios artificiales es muy similar a la batalla entre Guile y M.Bison al final de Street Fighter: la batalla final (De Souza, 1994)... Sabes que tu película está muy jodida si debes piratearle cosas a la peli de Street Fighter...
    Y bueno, para terminar rápido, la conclusión de la película es prácticamente un plagio de Pinocho en el que, por su sacrificio y sus buenas acciones, Alice es premiada al convertirse en una niña de verdad.


    El maquillaje de Alice anciana es malito y me recordó mucho al maquillaje de Guy Pearce como Peter Weyland en Prometeo (Scott, 2012).
    La película en general se siente agotada, cansada de sí misma y el argumento lucha desesperadamente por avanzar cuando ha demostrado que ya no tiene más a donde ir, y si los personajes principales se vuelven terriblemente anodinos, imagínense los secundarios, a los que ni siquiera me atrevo a llamar “personajes”, pues apenas si son un grupo de monitos que salen para que los maten. De muchos de ellos ni siquiera sabemos sus nombres.


    Esperaba que esta saga se despidiera con bombo y platillo... o que al menos regresaran más personajes de las entregas anteriores ‒que creo que fue el único acierto de Saw 3D (Greutert, 2010)‒ o... no sé. Un final más conclusivo hubiera estado bien. En cambio, por aquello de las dudas, esta película concluye anunciando la posibilidad ‒o amenaza‒ de futuras secuelas. A estas alturas del partido, la premisa se siente tan diluida como la salsa agridulce de un café de chinos. En su favor diré que es la única saga de películas basadas en videojuegos que no sólo llegó a ser trilogía; sino que la superó. Del mismo modo, se trata de la única saga cinematográfica, además de la de Harry Potter (2001-2011), que ha superado la tetralogía manteniendo al mismo personaje principal interpretado por la misma actriz ‒. Mi papá siempre dice que “Hay que envejecer con dignidad” y Resident Evil ciertamente no supo cómo hacerlo.
    Por cierto, se rumora que existe el proyecto de una serie de TV de la franquicia Resident Evil que sería la continuación de esta película.


PARA LA TRIVIA: La más accidentada de las producciones de la saga. La doble de Jovovich, Olivia Jackson, perdió un brazo debido a un accidente durante la filmación. El miembro del crew Ricardo Cornelius fue aplastado por un Humvee mal asegurado, a causa de lo cual perdió la vida.
PARA LA TRIVIA GEEK: El primer juego de la saga ostenta el Record Guinness por los peores diálogos en un videojuego.

Guión
0
Dirección
0
Actuación
1
Fotografía
0
Música
1
TOTAL
2


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lunes, 6 de febrero de 2017

RESIDENT EVIL 5: LA VENGANZA. La saga de Resident Evil, quinta parte.


RESIDENT EVIL 5: LA VENGANZA
Resident Evil: Retribution, Paul W.S. Anderson, 2012.

Después del fiasco que fue la cuarta parte ¿Quién esperaba algo de la quinta? Quizá por eso funciona más o menos bien, porque realmente nadie esperaba nada de esta película... por eso o porque básicamente se piratea el argumento de la novela Resident Evil: Underworld (Perry, S.D. Pocket Books, 1999), en la que Claire Redfield, Leon S. Kennedy y Rebecca Chambers se infiltran en una instalación subterránea en los cuarteles de Europa de la Corporación Umbrella y quedan atrapados en el área de pruebas conocida como The Planet, en la que se recrean 4 ecosistemas artificiales. Sea como fuere, esta película no es tan mala como la anterior... y, por lo menos, regresa Jill Valentine.


    En esta cinta, Alice (Milla Jovovich) es capturada y los sobrevivientes de la cinta anterior son masacrados por un comando liderado por Jill Valentine (regresa Sienn Guillory, a petición de los fans), quien se encuentra al servicio de la Corporación Umbrella gracias a un artefacto de control mental. Alice logra escapar de su celda con la ayuda de Albert Wesker (Shawn Roberts, quien ahora parece más Duke Nukem) y su agente infiltrada, Ada Wong (Bingbing Li), quienes necesitan a Alice para contraatacar a Umbrella, ahora controlada por la I.A. conocida como la Reina Roja (Megan Charpentier, voz de Ave Merson-O’Brian). Para extraer a Alice, Wesker utilizará a un grupo de mercenarios dirigido por Leon S. Kennedy (Johann Urb); pero no todo será tan fácil, pues Alice y los mercenarios deberán cruzar el sitio de pruebas subterráneo de Umbrella, en el que se recrean algunas de las ciudades más importantes del mundo pobladas por clones producidos en serie para simulaciones con armas biológicas.


    ¡Ah, los clones! ¿Qué sería de los argumentos agotados sin ellos? Revivieron a la Tte. Ellen Ripley, dejaron sin trabajo a Michael Keaton por más de una década, fueron el pretexto para la Trilogía de Precuelas de Star Wars y hasta resucitaron al Hombre de Acero después de que lo mataran porque la industria del cómic estaba por desmoronarse. Así, gracias a los clones, a esta película regresan Carlos Olivera (Oded Fehr), Rain (Michelle Rodriguez) y James “One” Shade (Colin Salmon).


    Regresan también el CGI chafón ‒la sangre digital debe ser una de las peores cosas que le han pasado al cine‒y las malas actuaciones. Y si Roberts y Jovovich ya eran malos, Li y Urb les dicen “quítate que ahí te voy”. Li es básicamente incapaz de demostrar alguna emoción o de dar matices a los diálogos que salen de su boca e incluso en varias tomas voltea a ver a la cámara. En su favor... o en su contra, ya no sé, habría que mencionar que no usaron su voz para la película, sino que fue doblada por la de la actriz Sally Cahill, quien hiciera la voz de Ada para Resident Evil 2 (Capcom, 1998), Resident Evil: The Darkside Chronicles (Capcom, 2009) y Resident Evil 4 (Capcom, 2005). Urb, por su parte, no puede quitarse de encima su acento tan marcado, lo que resulta en que sus diálogos suenen lentos y leídos, creando un Leon bobalicón. ¿Cómo estará la cosa, que creo que la que se lleva la película es Rodriguez?…
    Por cierto que las caracterizaciones están muy... “raras”, por decirlo de algún modo. Leon se ve demasiado viejo y el supuesto Barry Burton (Kevin Durand), demasiado joven. Siempre visualicé a Burton como un hombre ya mayor, pero fornido. El de la peli se ve demasiado enclenque y trataron de volver su muerte heroica, pero al final resulta ridícula.


    Todo el asunto de los diferentes ambientes artificiales es raro también. Para empezar, eso de sitios de pruebas que recrean lugares del mundo acomodados en forma de herradura me recuerda más bien a Epcot Center ‒ya saben, ese parque de Walt Disney World que nadie visita‒; pero lo más increíble fue que todo se filmó en locación. Así es, la producción sí se fue a filmar a Times Square en Nueva York, Shibuya en Tokio y la Plaza Roja de Kitay-górod en Moscú... y está padre; pero me parece francamente innecesario. Digo, se supone que son ambientes artificiales, ¿no? No tendrían por qué verse como los escenarios reales...
    En cuanto a las criaturas que les harán la vida imposible a los protagonistas de la peli, la falta de creatividad se hace presente una vez más. Regresan los Executioner ‒¿De verdad? ¿Con tantos mutantes que han aparecido a lo largo de seis videojuegos, tuvieron que repetir a los de la película anterior?‒ y hay un Mega Licker, o algo así, que está basado en los del videojuego Resident Evil 5 (Capcom, 2009). También aparecen los parásitos de Las Plagas y sus infectados, de Resident Evil 4 (Capcom, 2005), aunque es básicamente irrelevante para la trama. Finalmente, se confirma que los majini son una evolución de los zombies infectados por el Virus-T... aunque cómo o por qué evolucionaron sigue siendo un misterio.


    Lo que sí está padre son las coreografías. Las peleas están bien montadas y el esperado enfrentamiento nodal entre Jill y Alice ‒que, por cierto, se lleva a cabo en el hielo, como el enfrentamiento contra Nosferatu, uno de los últimos jefes de Resident Evil Code: Veronica (Capcom, 2000)‒ está bastante bien logrado... aunque esas tomas de golpes y fracturas en Rayos X son una referencia/fusil descarado de Mortal Kombat 9 (Mortal Kombat, Warner Interactive, 2011) .


    También al borde del plagio se encuentra el tercer acto de la peli, cuando Alice está por salir del sitio de pruebas y decide regresarse por Becky, la niña sorda ‒¿Por qué la Alice original sabía Lenguaje Signado?‒ que fue raptada y metida en un capullo por el Mega Licker... y casi ni se parece a cuando Ripley regresa al nido de los xenomorfos porque Newt fue raptada por uno de ellos y metida en un capullo en el último acto de Aliens: el regreso (Cameron, 1986).


    SPOILER Al final de la película, Wesker vuelve a inocular a Alice con el Virus-T, devolviéndole sus poderes... lo que es completamente irrelevante, porque según parece, es tan hábil con ellos como sin. También, según parece, Wesker se alía con los demás sobrevivientes para contrarrestar el ataque zombie a Washington, D.C.; lo que parece una referencia al videojuego Resident Evil 6 (Capcom, 2012) TERMINA SPOILER.


    A final de cuentas, Resident Evil 5: La venganza es bastante mala; pero no tanto como la anterior. Por lo menos entretiene y hay algunas secuencias bien hechas. Jovovich y Guillory ya se ven grandecitas y, mientras el vestuario de una es bastante anodino, el de la otra parece de cosplay chafón y... ¿Se le ve la ropa interior a Guillory a través de ese mono púrpura? ¡Ah, HD traicionero! Y el final queda abierto para la sexta parte, que promete ser de proporciones épicas.


PARA LA TRIVIA: En el audiocomentario para la primera cinta de Resident Evil (Anderson, 2002), Michelle Rodriguez dijo que  Colin Salmon debería volver en alguna secuela como un clon. En esta cinta, Salmon, Fehr y Rodriguez regresan como clones. Quizá lo merecieran después de todo, pues Rodriguez es una entusiasta de los videojuegos de RE que le dio instrucciones a su agente de conseguirle un papel en cuanto se enterara de que se produciría una películabasada en los juegos.
PARA LA TRIVIA GEEK: El proyecto que dio origen al primer videojuego de Resident Evil  (Capcom, 1996) inicialmente se planeó como un remake del videojuego Sweet Home (Capcom, 1989), para el Famicom de Nintendo. Dicho juego, basado en la película homónima de 1989, salió a la venta sólo en Japón y era una mezcla de thriller con RPG que narraba la historia de un grupo de documentalistas que entran en una mansión abandonada en el bosque para filmar las obras de arte resguardadas en su interior, encontrándose con que el recinto está habitado por monstruos. Elementos de Sweet Home que continuaron en Resident Evil son el espacio limitado para almacenar ítems, las pantallas de carga con puertas que se abren, los puzzles y las notas y documentos que el jugador va encontrando a lo largo del juego.

Guión
0
Dirección
1
Actuación
0
Fotografía
1
Música
1
TOTAL
3
      
    

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jueves, 2 de febrero de 2017

RESIDENT EVIL 4: LA RESURRECCIÓN. La saga de Resident Evil, cuarta parte.


RESIDENT EVIL 4: LA RESURRECCIÓN
Resident Evil: Afterlife, Paul W.S. Anderson, 2010

Para todas las sagas cinematográficas que han superado la tercia de películas es un reto continuar. El formato de trilogía que heredamos de los antiguos griegos suele ser estricto y celoso. La mayoría de las franquicias cierran sus líneas argumentales en la tercera parte y, si hay oportunidad de hacer una cuarta, más que una continuación, será un reinicio de la serie. Los ejemplos abundan: Halloween 4: el regreso de Michael Myers (Little, 1988), Pesadilla en la Calle del Infierno 4: El Amo de los Sueños (Harlin, 1988), Alien: la resurrección (Jeunet, 1997), Saw IV (Bousman, 2007), Hellraiser IV (Yagher, 1996)... son todas ejemplos de sagas que comenzaron con otra línea a partir de la cuarta parte. Pero Resident Evil no. La cuarta parte es una continuación directa de la tercera... aunque poco le importa.


    La historia sucede seis meses después del final de Resident Evil 3: La extinción (Mulcahy, 2007). Alice (Milla Jovovich, claro) encabeza un ataque frontal a los cuarteles generales de la Corporación Umbrella, en el subsuelo de Tokio. Luego de una pelea encarnecida con el director Albert Wesker (Shaw Roberts quien, de hecho, audicionó originalmente para el papel de Chris Redfield), Alice pierde sus poderes sobrehumanos y viaja a Alaska para reunirse con Claire Redfield (regresa Ali Larter en un papel que no le va). Sin embargo, al llegar allá, Alice descubre que los sobrevivientes de la caravana de Redfield han desaparecido y que la misma Claire se encuentra bajo una especie de control mental. Por razones poco claras, Alice viaja a la devastada ciudad de Los Ángeles, donde se refugiará con un grupo de sobrevivientes atrincherados en una cárcel abandonada. En dicha prisión se encuentra cautivo, por razones desconocidas, un prisionero peligroso: Chris Redfield (Wentworth Miller de la serie de TV Prison Break [2005-2009]... haciendo en esta película básicamente el mismo papel que en la serie... igual que en Alien vs Depredador 2 [Hnos. Strause, 2007]…), el hermano perdido de Claire.


    ¿Recuerdan el final de Resident Evil 3: La extinción en el que Alice armaba un ejército con sus clones y se disponía a atacar Umbrella? ¿Verdad que prometía ser una batalla de proporciones colosales? ¿Verdad que emocionaba? Bueno, pues mejor olvídenlo, porque esa línea argumental se agota cuando apenas si han transcurrido quince minutos de esta cinta. Y, de todos modos, quizá no está tan mal, porque el CGI con el que lograron multiplicar a la Jovovich está de risa. Nunca he estado completamente seguro, pero me parece que el vestuario que usa Alice en esta parte de la película es una referencia al utilizado por el personaje de Regina, protagonista del videojuego Dino Crisis (Capcom, 1999), un bien logrado autofusil de los Resident Evil. ¿Y cómo le hicieron los clones de Alice para desarrollar poderes psíquicos equiparables con los de la original? El Dr. Isaacs en la cinta anterior dijo que no podían...




    Esta fue la primera película de la saga en filmarse en formato 3D... y parece niño con juguete nuevo. La fotografía presta mucha más atención a lucir el 3D que a realmente conformar una narrativa eficiente. Esto resulta en un abuso de la cámara lenta y una pérdida de la profundidad de campo en la mayoría de las tomas abiertas que delata el uso de escenarios virtuales. Los cuales, por cierto, se ven horribles. El CGI sigue siendo malo, incluso me parece que se ve peor que en la peli anterior. Pero bueno, no es algo tan malo, porque sí me sacó varias carcajadas. Las escenas en la cabina del avión se ven tan chafas que harían sonrojar a Roger Corman... y también me hicieron reír.


     Pero nada se ve tan falso como los sobrevivientes en la cubierta del buque Arcadia al final de la peli. Creo que los juegos de Resident Evil en el primer PlayStation se veían más reales. Aunque debo reconocer que la escena se filmó en los muelles de Toronto, mismos que fueron retirados digitalmente y casi no se nota. También debo reconocer que la escena del cementerio de aviones, en la que sólo había siete aviones reales, se ve decente.



    Hablando del avión, ¿qué onda con esa escena en la que Alice aterriza en el techo de la prisión? Es innecesariamente larga. No aporta nada realmente a la historia y más bien me hace pensar que a los realizadores ya les habían aburrido los zombies ‒tal vez los zombies serían más interesantes si no hubieran usado máscaras de una sola pieza para la mayoría de ellos‒. También es interesante la secuencia subacuática, que me recordó a La aventura del Poseidón (Neame, 1972)... sólo que en aburrida. Quiero decir, ¿para qué sirve esa secuencia si no pasa nada hasta que los personajes salen del agua?


    Además de los zombies, nuevas criaturas y elementos fueron introducidos al universo cinematográfico de Resident Evil, casi todos ellos tomados directamente del videojuego Resident Evil 5  (Capcom, 2009)‒aunque el interior del barco me recordó a un escenario en el juego Resident Evil: The Umbrella Chronicles (Capcom, 2007)‒. Así, en pantalla aparecen los superpoderes de Wesker, el artefacto con forma de escarabajo que controla la mente, los majini ‒de verdad, son hilarantes‒ y el gigante armado con un hacha conocido como Executioner (Raymond Olubawale). Cómo, cuándo o por qué aparecieron los majini o los zombies mutaron en majini o de dónde diablos llegó el Executioner son misterios que la película no se toma la molestia de explicar.
    El resto de los personajes son prescindibles y anodinos, y... ¿Qué más da? Ya sabemos que se van a morir porque ni son Alice ni salieron en los videojuegos. SPOILER Al menos regresan K-Mart (Spencer Locke) y, en un epílogo que la muestra ahora como villana, Jill Valentine (Sienna Guillory, lo que todos esperábamos)‒.TERMINA SPOILER


    El guión es poco claro y, mientras uno está viendo la película, le causa esa desagradable sensación de que no está llevando a ningún lado. Además, deja demasiados cabos sueltos, como el hecho de que Alice supuestamente pierda sus poderes, lo cual es completamente irrelevante para la trama porque ella puede seguir haciendo acrobacias y resistiendo golpizas brutales sin mayor empacho. En su favor diré que había una secuencia en la que se explicaba que la sangre de Alice peleaba contra los anticuerpos inyectados por Wesker y por eso conservaba parte de sus habilidades; sin embargo, la escena fue eliminada del corte final de la cinta.


    A final de cuentas, Resident Evil: La resurrección es quizá la peor cinta de la serie. Resulta aburrida, inverosímil y parece demasiado desesperada por incorporar las últimas adiciones de la franquicia de entretenimiento electrónico en la saga fílmica. Es decepcionante que, básicamente, manda a volar la línea argumental planteada por la peli anterior; pero es más decepcionante aún que no tenga prácticamente nada con qué sustituirla. Además, siempre me ha parecido que la película dura más de lo que debería, como que toda la parte del Arcadia se siente forzada y, a final de cuentas, parece que la cinta no tiene en realidad un hilo conductor y que sólo son un montón de cosas que pasan y ya. Ni siquiera hay toma topless de Milla Jovovich en ésta.



PARA LA TRIVIA: Ésta es la única película de la saga que no incluye un plano detalle del ojo de Alice, lo cual es una referencia directa a las pantallas de inicio de los primeros videojuegos de la serie.
PARA LA TRIVIA GEEK: El primer videojuego de la saga estaba planeado para ser un First Person Shooter al estilo de Doom (id Software, 1993); pero Shinji Mikami, director del proyecto, creyó que el juego funcionaría mejor como Survival Horror, por lo que decidió retomar la perspectiva en tercera persona del videojuego de más exitoso del género hasta el momento, Alone in the Dark (Infogrames, 1992).

Guión
0
Dirección
1
Actuación
0
Fotografía
0
Música
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TOTAL
2